Pertenecen a la familia Cichlidæ, subfamilia Tilapiinæ. El género es Symphysodon. Proceden de ríos tributarios del Amazonas, tales como el Río Negro, Río Tapajós, Río Ica, Río Purús, Río Madeira o del Lago Tefé aunque se reconocen leves diferencias de especie de acuerdo a su procedencia. Estos cursos de agua se caracterizan -en lo que nos interesa- por ser de aguas marrones, muy blandas y ácidas. Estos hábitats reúnen raíces, troncos, algas, y el material en descomposición de la selva. Las plantas, por su parte, son lanceoladas o colgantes y contribuyen al camouflage proporcionado por las barras, así como también sirven como superficie de desove. Pueden citarse entre estas últimas a los echynodorus y las espadas amazónicas.
Por otra parte, los Discus salvajes no moran donde hayan fuertes corrientes, más bien las aborrecen. Esto último no es nada extraño observando su forma circular, de la cual toman el nombre de la especie básica. Tal complexión, en un ambiente de rápidos los arrastraría dada su gran superficie lateral.
En su estado natural, el S. discus, tiene nueve barras dorsales verticales marrones desde la cabeza hasta el pedúnculo caudal. La primera, cruza el ojo que es de color rojo. Las especies de acuario, mantienen esas barras escondidas en su vida adulta, mostrándolas únicamente durante los primeros meses de vida.
Siguiendo con la descripción morfológica, hallamos que el cuerpo es comprimido en sus laterales; son peces dentados, con escamas ctenoides. Las aletas dorsal y anal siguen la forma redonda del cuerpo sin ser muy largas tienen -dado el contorno- grandes bases y reproducen el color del cuerpo. La aleta caudal, por su parte, es suavemente espatulada. Finalmente, cuentan con dos largas aletas pélvicas puntiagudas que nacen por delante de los órganos genitales.
Veamos ahora los promedios de su hábitat: